Siegfried Von Aldyk

Su carácter es el digno de un viejo samurái y del demonio de las nieves. Es serio al extremo, gruñón, huraño y burlón, llegando a ser muy cruel con sus comentarios cuando considera que has fallado. Aunque a sus ojos demasiada gente no es más que escoria que no merece pisar la tierra que pisa, así que no esperes una sonrisa franca o un comentario de apoyo y mucho menos si fallas y mucho más si al que fallas es a el mismo. Recto en todo lo que hace, sigue el Bushido al pie de la letra y espera que todo aquel muy cercano a él lo siga o al menos lo conozca. Responsable de sus acciones, no actúa jamás sin pensar muchas veces en lo que pasara cuando actué y es un hombre de muy pocas palabras. Pero por debajo de su capa de hielo perenne, es un amante bastante fiel, cariñoso y que hace todo lo posible porque su amado sea feliz. No es muy bueno demostrando afecto, pero a su manera puede darte las estrellas con un listón y hacerte sentir el único en el mundo. Juguetón con solo dos persona, su hijo y con el padre de su hijo, con solo ellos dos se le puede ver sacar parte de ese niño, que jamás tuvo una infancia en todo aspecto.

-  Tiene un hijo que tuvo con su mejor amigo cuando tenía 17 años, el niño tiene 8 años ahora.
- Le gusta mucho el silencio, lo adora, como el pasar mucho tiempo en su enrome jardín cultivando flores, haciendo arreglos florales o pintando a tinta.
- Entrenar con su katana como dar largas cabalgatas, el perderse un tiempo de la vida, ir a alguna cabaña alejada de todos y estar solo.
- El ruido excesivo le causa ganas de masacrar a quien lo provoque, le pone de muy mal humor los mocosos llorones o gritones
- El sexo, los besos candentes bajo la lluvia o bajo las sabanas…lo derriten, pero no ah tenido vida sexual desde que su hijo nacio
-…..Su mayordomo le provoca ganas de mandarlo a Marvos cuando se propasa con el….